En los locos años 20, una era marcada por el jazz, la cultura “flapper” y la clandestina seducción de la Ley Seca, los llamados speakeasies emergieron como vibrantes epicentros de socialización clandestina. Ocultos tras puertas sin señañizar, estanterías o incluso sótanos, estos bares ilícitos sirvieron bebidas alcohólicas censuradas, convirtiéndose en símbolos de rebelión y resiliencia.
Hoy, la mística de la era del speakeasy es celebrada durante el Día Nacional del Contrabandista de Licores, celebrada anualmente cada 17 de enero. Quizás no por coincidencia, esta fecha marca el nacimiento de Al Capone, una de las figuras más notorias de la Ley Seca, pero también coincide con el inició de la Prohibición en los Estados Unidos en 1920. La jornada sirve como recordatorio de la era en la que la producción, transporte y venta de bebidas alcohólicas fueron prohibidos por todo el país, llevando al auge de los contrabandistas de licor y los speakeasies.
Ahora, estos antiguos speakeasies invitan a visitantes actuales a atravesar sus puertas hacia una era ya desaparecida. No sólo ofrecen bebidas, sino un viaje al corazón de la década de 1920, permitiendo a su clientela susurrar los secretos del pasado junto a un cóctel meticulosamente preparado. De modo que empieza a buscar boletos de vuelo baratos y unete a nosotros en un recorrido por los históricos corredores de los antiguos speakeasies más icónicos de América, los cuales sirven ahora a los curiosos y los aventureros.
Chicago

Al Capone’s Booth – The Green Mill, Chicago por Tom Gill está licenciada bajo CC BY-NC-ND 2.0 DEED
Con su notorio pasado interconectado con figuras de la talla de Al Capone, Chicago es una ciudad completamente inmersa en el contexto de la era de Ley Seca. Este legado está completamente vivo en sus antigos speakeasies. The Green Mill en Uptown, un histórico club de jazz, todavía resuena con los sonidos y brebajes de los 1920. Todo un favorito de Al Capone en su día, este establecimiento es el prototípico speakeasy, incluyendo túneles secretos para huidas rápidas. Hoy continúa triunfando al ofrecer jazz en directo en una atmósfera que parece congelada en el tiempo.
Otra reliquia de esta era es The Berkshire Room, ubicado en el Acme Hotel. Este lugar sirve ahora como un sofisticado bar de cócteles, maridando su historia oculta con mixología contemporánea. Visitar estos lugares de interés en Chicago es un viaje inmersivo al pasado donde el atractivo de lo prohibido definió una era entera.
Nueva York

NYC – West Village: Chumley’s por Wally Gobetz está licenciada bajo CC BY-NC-ND 2.0 DEED
En las laberínticas calles de Nueva York, los ecos de la Ley Seca resuenan a través de reverenciados establecimientos que en su día sirvieron como speakeasies. Greenwich Village, conocido por su espíritu bohemio, esconde una de estas históricas gemas, Chumley’s. Oculto en sus encantadoras calles, Chumley’s comenzó como un speakeasy en 1922 y aún mantiene un aire de misterio con su entrada oculta y ausencia de letrero (puedes encontrarlo en el 86 de Bedford Street, entre Grove y Barrow.)
Aventurándote en Midtown Manhattan, 21 Club sobrevive como un testamento del resiliente espíritu de la ciudad durante los años secos. Originalmente un speakeasy durante la Ley Seca, el 21 Club ha evolucionado en un restaurante y bar de alto standing. El club tiene una rica historia como punto de reunión de celebridades y políticos, y hasta sirvió de lugar predilecto para varios Presidentes de los Estados Unidos.
San Francisco

Bourbon & Branch – Bar View por Zagat Buzz está licenciado bajo CC BY-NC-SA 2.0 DEED
San Francisco también alberga el fascinante pasado de la era de la Ley Seca. El legado de speakeasies de la ciudad queda reflejado en el Bourbon & Branch, ubicado en el colorido vecindario de Tenderloin. Este bar, un genuino speakeasy durante la década de 1920, continúa respetando las secretas tradiciones de dicho período. Los clientes deben susurrar una contraseña para acceder, manteniendo un halo de misterio y exclusividad reminiscente de sus ilícitos orígenes. El interior del local, con estancias ocultas y una disposición laberíntica, se une a la autenticidad de la experiencia del speakeasy.
La historia marítima de San Francisco jugó un papel crucial durante la Ley Seca, con su ubicación costera haciendo de la ciudad un punto de máximo interés para las operaciones de contrabando. Visitar Bourbon & Branch es transportarte a un tiempo cuando la ciudad bullía con infames actividades y la emoción de lo prohibido.
Detroit

The Sugar Bar, Detroit por Yelp Inc. está licenciada bajo CC BY-NC-ND 2.0 DEED
Detroit es una ciudad profundamente asentada en la historia industrial americana, pero también tiene un rico pasado de la era de la Ley Seca. Esto se debe particularmente a su estratégica ubicación junto a la frontera canadiense, convirtiéndola en una ciudad clave para introducir alcohol de contrabando en Estados Unidos durante la Prohibición. Un brillante ejemplo de la herencia speakeasy de Detroit es The Sugar House, situado en el histórico barrio de Corktown. Este establecimiento opera ahora como un reputado bar de cócteles. Rinde homenaje a su colorido pasado con una selección meticulosamente escogida de licores y una cálida, íntima atmósfera que retrotrae a las reuniones clandestinas de los 1920.
Nueva Orleans

Carousel Bar, Hotel Monteleone por Dan Silvers está licenciada bajo CC BY 2.0 DEED
Nueva Orleans es una ciudad sinónimo de vibrante cultura y festividades donde corren ríos de alcohol, y jugó un papel de lo más importante durante la Ley Seca. A diferencia de otras urbes, Nueva Orleans mantuvo su atmósfera abiertamente festiva, integrando sutilmente speakeasies en su animado tejido social. La aplicación relajada de las leyes de la Ley Seca en la ciudad permitió una floreciente escena subterránea, donde la música jazz y las bebidas ilícitas se mezclaban sin esfuerzo alguno.
Un notable ejemplo es Carousel Bar & Lounge en el histórico Hotel Monteleone. Aunque el hotel en sí mismo no fue un speakeasy propiamente dicho — más bien un local donde poder traer tu propia bebida — se convirtió en un lugar de reunión habitual para quienes buscaban la emoción de catar estas libaciones en plena Ley Seca. Hoy, el Carousel Bar, famoso por su bar y elegante atmósfera, sobrevive como un eco del espíritu festivo de los 1920.
Filadelfia

Rittenhouse Square, Filadelfia
Conocido por su espíritu revolucionario, Filadeldia acogió una red de speakeasies que atendieron la demanda de licores prohibidos en la ciudad. De entre ellos, la Franklin Mortgage & Investment Company destaca como un notable ejemplo. Este establecimiento — informalmente conocido como “The Franklin” — se encuentra en el corazón de Rittenhouse Square y opera en un espacio que antaño sirvió como fachada de la mayor operación de alcohol ilegal de todo el país durante la Ley Seca.
Hoy, Franklin Mortgage & Investment Company homenajea su interesantísimo pasado con una atmósfera reminiscente de los speakeasies clásicos y un extenso menú de cócteles expertamente suministrados. El discreto encanto del bar y su sofisticada atmósfera transporta a los visitantes atrás en el tiempo a una era donde las reuniones secretas y las conversaciones entre susurros estaban a la orden del día.
Los Ángeles

The Varnish – Piano por Zagat Buzz está licenciada bajo CC BY-NC-SA 2.0 DEED
Los Ángeles, una ciudad sinónimo de glamour y la edad de oro de Hollywood, también posee un rico pasado ambientado en la Ley Seca. Durante la década de 1920, L.A. se convirtió en un nexo de speakeasies, especialmente en y alrededor de Hollywood, donde las estrellas de cine y empresarios cinematográficos buscaron refugio en el clandestino mundo de los bares ilícitos. Uno de estos lugares es The Varnish, un celebrado bar de estilo speakeasy oculto en la parte trasera de Cole’s, uno de los pubs más antiguos de Los Ángeles. El propio Cole’s esconde una rica historia, y The Varnish continúa este legado ofreciendo un entorno discreto e íntimo que te traslada a las reuniones secretas de la Prohibición.
The Varnish captura la esencia del speakeasy con su entrada sin señalizar, tenue iluminación y cócteles clásicos, proporcionando un vistazo a la secreta vida nocturna de la ciudad en los 1920. En la cultura de speakeasies de Los Ángeles tuvo tanta importancia el encanto de lo prohibido como el glamour de la emergente industria cinematográfica, un capítulo fascinante en la dinámica historia de la ciudad.
FAQs:
P: ¿Cuál es el mejor momento para visitar estos históricos speakeasies?
R: El mejor momento para visitarlos depende de la ubicación, pero las tardes y los fines de semana normalmente ofrecen la experiencia más vibrante. Sin embargo, para una visita más tranquila, los días entre semana al mediodía o temprano por la tarde son las mejores opciones. Comprueba las páginas web de cada speakeasy para horarios específicos y eventos especiales.
P: ¿Necesito hacer una reserva para visitar estos speakeasies?
R: Se recomienda hacer reservas, especialmente para locales populares como el 21 Club en Nueva York o The Varnish en Los Ángeles. Algunos lugares pueden aceptar visitas improvisadas, pero es mejor comprobarlo con antelación.
P: ¿Hay un código de vestimenta para estos establecimientos?
R: El código de vestimenta puede variar. Algunos speakeasies, particularmente los más lujosos como el 21 Club, podrían requerir vestimenta “smart casual” o directamente formal. Otros son más relajados. Comprobar la página web de cada local o llamar con antelación es siempre aconsejable.
P: ¿Puedo tomar parte en recorridos guiados en estos speakeasies?
R: Sí, algunas ciudades ofrecen recorridos guiados por speakeasies. Estos tours a menudo incluyen contexto histórico y acceso a múltiples speakeasies. Es una manera estupenda de aprender más sobre la historia y la cultura de estos establecimientos.
P: ¿Son estos speakeasies aptos para abstemios?
R: Por supuesto. Muchos speakeasies ofrecen una selección de bebidas no alcohólicas y se centran en la experiencia y atmósfera general, resultando disfrutables para todo el mundo.
P: ¿Existe una restricción por edades para acceder a estos speakeasies?
R: Al ser bares, la mayoría de speakeasies requieren a su clientes que tengan al menos 21 años de edad. Algunos podrían permitir la entrada a visitantes más jóvene durante horas específicas o para eventos privados, pero generalmente aplican restricciones de edad.
P: ¿Se sirve comida en estos speakeasies?
R: Algunos speakeasies ofrecen un menú de pequeños platos o comidas completas, especialmente aquellos que operan como restaurantes como el 21 Club. Lo mejor es revisar sus menús online para leer sus opciones completas de comida.
¿Alguna vez has visitado uno de estos antiguos speakeasies? ¡Cuéntanos tu experiencia en nuestra sección de comentarios a continuación!